Fortaleza de dos
En los valles y montañas que cruzamos,
tu mano firme siempre me sostiene,
nuestro respeto, amor que no se detiene,
juntos, en la adversidad, nos apoyamos.
Como pilares de un templo sagrado,
tu fuerza y mi fe se entrelazan,
en cada reto, nuestros corazones se abrazan,
y en ese apoyo, juntos descansamos.
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